SANT JOAN, Pere de

Marco Temporal

Documentado entre 1396 y el 15 abril 1431

Marco Geográfico

Originario de la Picardía; activo en Cataluña: en Mallorca, Girona, Elna ( ?), Perpiñán, Castelló d’Empúries (atr.), Seu d’Urgell, Barcelona

Técnicas

Escultor, maestro de obras

Perfil y debate historiográfico

[Pierre de Saint-Jean]

Pere de Santjoan aparece por primera vez en la documentación el 1396-1397, fecha en la que es designado maestro de la portada del Mirador de Mallorca, portalada sur de la iglesia de Sant Miquel, al parecer empezada el 1389 por el escultor mallorquín Pere Morey, las obas de la cual, después de un período de lentitud o interrupción, se retoman a partir de junio de 1393 con la llegada de dos escultores extranjeros, Johan de Valencines y Rich Alamant (éstos identificados tradicionalmente con Jean de Valenciennes y Henri l’Allemand). La pérdida de los documentos contables de los años 1374 hasta 1389 dificulta la confirmación del inicio de los trabajos pero, como apunta Joan Domenge i Mesquida, las menciones que contiene el libro de cuentas de 1389 muestran que en este momento la portada está en el inicio de su construcción. La muerte del maestro de obras, Pere Morey, el 29 de enero de 1394, interrumpe brutalmente los trabajos y los clérigos mallorquines intentan que Guillem Morey, hermano del difunto y reciente maestro de obras de la catedral de Girona, se haga cargo de éstas. Por desgracia, los registros financieros de los años 1394 hasta 1397 han desaparecido y no ayudan a aclarar la continuación de estos sucesos. Así pues, a partir de 1396 la dirección de los trabajos es confiada al escultor Pere de Santjoan.

Durante los años 1396 y 1397, este último recibe una pensión anual de 12 libras y realiza un dibujo de la portada con visibles modificaciones del proyecto de Pere de Morey, perceptibles en el alzado del gablete. Antes del final de los trabajos en la portada mallorquina y cuando la obra se encuentra en una fase de actividad intensa, Pere de Santjoan aparece como maestro mayor de la catedral de Girona, el 2 de marzo de 1397, obra en la que será remplazado por Guillaume Bofill a partir de 1904. El artista continúa residiendo un tiempo en Girona, donde aún aparece documentado el 1405, pero las siguientes menciones permiten entrever que se instala en el Rosellón, quizás en Elna o Perpiñán. El noviembre de 1405, Pere de Santjoan es arquitecto en la obra de Saint-Jean de Elna, donde interviene en el coro. Algunos meses más tarde está documentado en Saint-Jacques de Perpiñán, el 6 de marzo de 1406 en motivo de una visura de un tabernáculo realizado por el pintor y escultor Jaume Brot. Después de un largo silencio documental, pues debemos esperar a 1410, se incorpora para esculpir la sillería del coro de la catedral de Santa Maria de la Seu d’Urgell. Estos trabajos, realizados bajo el obispo Galceran de Vilanova (1388-1414), son objeto de disputas, por lo que el artista parte de la Seu d’Urgell hacia Barcelona. En efecto, lo rencontramos el 1415 al servicio del monasterio de Sant Agustí el Vell con el título de magister monsonaria. Empieza aquí una nueva portada para la capilla de la Virgen de la Piedad, en el claustro hoy destruido. La última cita de Pere de Santjoan remonta al 15 de abril de 1431, cuando recibe 43 sueldos del capítulo de la catedral de Barcelona para ir a Vilafranca de Conflent para asegurar que la piedra extraída de su cantera es adecuada para la realización de fuentes bautismales. Éstas son finalmente acabadas por un escultor florentino el 1433, lo que deja creer que, en esta fecha, Pere de Santjoan ya había muerto.

Algunas obras documentadas permiten hacer una tentativa de identificación del estilo de Pere de Santjoan y de atribución de diversas obras. Su actividad como escultor, primero en Mallorca y después en la Seu d’Urgell y Barcelona, es utilizada por Marcel Durliat para analizar la génesis del estilo de Guillem Sagrera. Gabriel Alomar retoma esta hipótesis y subraya la importancia del momento artístico de la portada del Mirador de Mallorca, con el cual se abre una nueva etapa de la historia de la escultura española que tendrá su eco durante todo el siglo XV. La actividad, en esta última obra, de Pere de Santjoan, Jean de Valenciennes, Henri l’Allemand y el mallorquín Pere Morey rompe en efecto con el arte catalán anterior. Para Marcel Durliat, la recepción en la península Ibérica del trabajo de los escultores septentrionales en la primera mitad del siglo XV se tradujo en algunos rasgos de realismo en los rostros pero se trataba de obras de “calidad mediana que no se distinguen de la producción común”. Las cosas cambian a partir de las últimas décadas del siglo XIV y de la actividad de Pere de Santjoan.

A pesar de no estar datada con precisión, la portada de Castelló d’Empúries, “última gran portada catalana con estatuas”, tiene que reubicarse en este panorama artístico. Marcel Durliat atribuye la portada de Castelló d’Empúries a Pere de Santjoan en un inicio por comparación con la portada principal de la iglesia de Sant Miquel de Palma de Mallorca, apuntando las similitudes en las proporciones, los drapeados y la caída de los pliegues, en la forma de la cabellera con ondulaciones regulares y en la relativa torpeza de los cuellos y los brazos de los personajes. Las similitudes son efectivamente visibles entre las distintas obras, atestiguando una sensibilidad cercana. La atribución de las esculturas de la portada de Castelló d’Empúries a Pere de Santjoan y la historia de la obra ha conducido a Pere Freixas Camps, después de Marcel Durliat, a situar su realización entre 1406 y 1410, es decir, durante el vacío documental que afecta al artista picardo, entre los trabajos de Perpiñán y los de la catedral de la Seu d’Urgell. La hipótesis reposa sobre argumentos sólidos y parece estar actualmente aceptada.

En la catedral de Girona, uno de los pilares lleva una escultura de un Gabriel de la Anunciación, que sostiene una filacteria que lleva la inscripción AVE MARIA GRA”; al lado opuesto, un san Jorge de factura más tardía parece pertenecer a un período más avanzado del siglo XV. Aquí podemos seguir razonablemente la opinión de Joan Valero Molina, quien restituye en lugar del santo guerrero una representación antigua de la Virgen. O el Gabriel conservado de este grupo presenta rasgos estilísticos suficientemente cercanos a la producción documentada de Pere de Santjoan para poder incrementar su catálogo de atribuciones. El autor destaca, por ejemplo, que el tratamiento del cuello “ancho y robusto” constituye una constante del trabajo del escultor. En Girona, fuera de la catedral, Pere de Santjoan parece haber trabajado para el hospital de Santa Caterina. Una Virgen de alabastro que fue descubierta el 1936 muestra en efecto su estilo: la posición bastante inclinada del cuello, la forma ovalada del rostro neutro y sin expresión. Es probablemente la misma Virgen que Marcel Durliat cita el 1963 para mostrar similitudes, efectivamente sorprendentes, con una figura de santa que decora el gablete derecho de la portada de Sant Miquel, en Palma de Mallorca. Los Apóstoles que decoran las jambas de la portada de Santa Maria da Vitória de Batalha en Portugal se inscriben claramente en la continuidad del estilo de Pere de Santjoan. Esta posible fuente catalana de los talleres de escultura que trabajan en Batalha puede estar relacionada con las disposiciones de la propia arquitectura.

Obras

  • Portalada del Mirador de Sant Miquel de Palma de Mallorca 
  • Portalada de Castelló d’Empúries (atr.)
  • Sillería del coro de la catedral de la Seu d’Urgell 
  • Portalada del claustro de Sant-Agustí el Vell de Barcelona (destruido) 

Textos Documentales

Documentado entre 1396 y 1431. Todas las fuentes han sido publicadas.

Texto: Jean-Marie Guillouët 

Bibliografía

LAVEDAN 1935; RÀFOLS III 1954: 33-34 ; DURLIAT  1963; ALOMAR  1970; BEAULIEU- BEYER 1992: 31 ; DOMENGE 1997: 211-216 ; VALERO  2001: 221-236, 222 ; FREIXAS 2002: 51-59 ; GUILLOUËT 2010-2 : 31-44; DOMENGE 2005; GUILLOUËT 2011.